Podemos considerar el juego como parte imprescindible en la vida de los niños. El juego es la base del aprendizaje; ya desde bebés descubren su entorno a través del mismo. Tiene que ver en el desarrollo psicomotor, la creatividad, en el desarrollo socio emocional, etc.
¿Quién no se ha hecho collares con flores cuando era pequeño? Yo recuerdo hacer unos collares preciosos con las flores del Don Pedro de mi abuela y unas ramitas. Así, sin darnos cuenta estábamos trabajando la psicomotricidad fina.
Del mismo modo, aquí os dejo esta idea, para hacer con material sencillo que seguro todos tenemos en casa.
Os suena esa frase de: ¿Mamá puedo ayudarte? Que nos hace mucha gracia, y que es buenísimo para su desarrollo, pero si accedemos a la misma sabemos que vamos a tener tarea doble.
Para poder trabajar el aprendizaje de la vida cotidiana a través del juego y evitando el consabido lío que tendremos si accedemos a que nos » ayuden» cuando son muy pequeños, estas ideas tan divertidas a la vez que creativas serán un buen comodín.
Si son un poco más mayores será divertido enseñarles días, estaciones, tiempo atmosférico, horas etc, de esta manera tan sencilla, que seguro les encanta.
Y una gran ayuda para mates, lengua, etc.
Recuerdo que mi abuela que era modista, sin temor alguno, en los días que no se podía salir a la calle, nos ataviaba con aguja, hilo y tela y pasábamos una tarde de lo más entretenida. Hoy no les daríamos una aguja tan alegremente, pero siempre podemos trabajar de este otro modo.
Espero os hayan gustado estas ideas basadas en el método Montessori, aprendiendo a vivir jugando.