Ya tenemos el carnaval a la vuelta de la esquina.
A los peques de la casa les encanta disfrazarse; ¿que decir de mamis y papis?, verlos disfrazados hace que se nos caiga la baba.
Además de ser muy divertido, disfrazar a los niños les aporta cosas muy positivas:
1. Activa su capacidad para imaginar.
2. Favorece la sociabilidad.
3. Estimula la libertad de expresión a través del juego.
4. Fomenta la empatía (al desempeñar otros roles, aprende a meterse en la piel de otro)
5. Trabaja el pensamiento simbólico.
6. Incrementa la autoconfianza.
7.Ayuda a establecer su propia identidad ( la libre elección del disfraz)
8. Fortalece el entendimiento del mundo adulto.
9. Contribuye en el desarrollo de la psicomotricidad.
10. Libera tensiones.
A la hora de elegir disfraz para un peque, hemos de tener en cuenta:
1. Que sea cómodo, para que se pueda mover con libertad.
2. Que pueda ponérselo y quitárselo con facilidad.
3. Que no contenga materiales que puedan resultar peligrosos.
¿Vosotros ya sabeis de que vais a disfrazaros?
Aquí os dejo algunas ideas:
Este último tan sencillo de hacer, es diseño propio, ¿ Os gusta?
Espero que os haya sido útil.