Muchos son los elementos decorativos, alimenticios y de atrezzo que estamos utilizando estos días para amenizar nuestras fiestas de halloween para que sean de lo más molonas.
Pero todo esto en algunos pequeños puede tener una cara B. Y es que sobre los 3 o 4 años, los niños comienzan con el aprendizaje externo del miedo.
Y, ¿como vamos a meterles los monstruos hasta en la sopa sin que se len metan en la cama?
Pues, aquí dejamos unas herramientas perfectas para la ocasión: Los Libros.
A mi no me comas: Inspirado en las propias vivencias de Margarita del Mazo, el miedo a la oscuridad cuando era pequeña. En este álbum, los niños comprobarán, que nos son los únicos a los que les asustan las sombras, convirtiéndo a cualquiera de ellas en un monstruo, tan como cuenta el protagonista.