El post que leeréis a continuación es la colaboración de una de las fantásticas blogueras que forman parte de nuestro Universo Blogger. Como buena Alicantina, Mª José, nos muestra a través de esta ventana lugares emblemáticos de su tierra, donde poder disfrutar en familia.
Si sois papás y viajeros, no dejéis de visitar su blog: Con los niños en la mochila.
Cuando pensamos en la Costa Blanca, nuestra mente se marcha automáticamente a la playa. Por un instante nos imaginamos bañándonos en las maravillosas aguas del Mediterráneo junto a nuestros peques, disfrutando de los soleados días. Y es más que cierto. La costa alicantina es una maravilla para disfrutar en familia.
Podemos acercarnos a la playa de Muchavista, en la localidad de El Campello. Sus más de 3km. de arena blanca invitan a largos paseos a la orilla del mar, a relajarse escuchando el sonido de las olas, a jugar en sus zonas infantiles, a construir enormes castillos…
Podemos descubrir poblaciones tan bonitas como Altea, conocida como la cúpula del Mediterráneo. Un pueblo costero del que hay que disfrutar tanto de su paseo marítimo como de su casco antiguo, que es una preciosidad.
Podemos visitar Villajoyosa con sus pintorescas casas de colores y su famosa fábrica de chocolate (no olvidéis tomaros luego una buena taza).
O podemos sentirnos como caballeros y princesas mientras recorremos una de las mayores fortalezas y de las mejores conservadas de la provincia: el Castillo de Santa Bárbara en Alicante.
Pero “La Terreta” tiene mucho más, es mucho más. Si la costa es una maravilla, el interior de la provincia alicantina no se queda atrás. Las opciones son infinitas y para todos los gustos.
El valle del juguete, nos permite descubrir localidades que harán las delicias de los niños, como Onil donde podemos visitar el museo de la muñeca o la fábrica de playmobil o Ibi y su montón de parques infantiles tematizados.
Y quienes quieran pleno contacto con la naturaleza pueden acercarse al nacimiento del Vinalopó, cerca de Banyeres de Mariola, y disfrutar del Molí L’Ombría o dejar el coche en la Ermita de San Cristóbal, en Cocentaina, y subir caminando a su castillo desde el cual disfrutarán de unas vistas espectaculares.
Como ves, en la Costa Blanca siempre puedes encontrar el plan perfecto para ti y para tu familia. ¿Y tu? ¿Eres más de playa o de montaña?
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